Santiago, 30 de diciembre de 2020.-

 

El año 2010, el Centro de Microdatos de la Universidad de Chile reveló un estudio en el que se afirmaba un dato muy alarmante: el 84% de los adultos chilenos no ha demostrado comprensión lectora adecuada en textos largos o en textos complejos. Esta información marcó un antes y un después en el quehacer educativo de la escuela María Luisa Bombal, pues para su equipo directivo el trabajar para ayudar a revertir esas cifras, era un tarea que querían asumir como escuela.

Con esa fundamentación, la Directora del establecimiento, Gabriela Vega, comenzó a establecer metas, principalmente en 1° básico. Según relata, estas metas las trabajó con cada docente, “me sentaba con cada profesora y les preguntaba, textualmente, dígame… ¿cuándo va a tener leyendo al curso?” Fue así como posicionó la importancia de la lectura en su escuela. De acuerdo a lo que indica, “la lectura debe ser vista como un medio que aumenta la concentración en los niños, más leen, más se puede concentrar y eso ayuda, por supuesto, como asignatura instrumental a todas las otras asignaturas, aumenta el deseo de saber, favorecer la expresión oral, la imaginación y la creatividad de los niños.”

Durante el primer año, el proceso comenzó con una serie de monitoreos, involucrando a toda la comunidad educativa. Además, se reforzó el Programa de Integración con tutores que apoyaran el proceso lector de los niños que más lo necesitaban. Sin embargo, al comenzar el segundo año, pensaron en un detalle no menor, “nos dimos cuenta que no disponíamos de un método de enseñanza como escuela, cada profesor ensañaba como estimaba que era conveniente, con sus propias herramientas, cada profesor trabajaba con un método individual porque le había dado mejor resultado, pero no teníamos algo que nos definiera como un proyecto curricular”, comenta su directora, enfatizando, “gracias a eso, hicimos seriamente un compromiso institucional, se va a utilizar el método que ya se hizo tradicional en la escuela donde se demuestra la comunidad cómo leen los niños en primero porque eso eleva mucho el autoestima institucional, el ver cómo están los niños y eso ha generado impacto en estas generaciones, las últimas generaciones, ya todas van con un nivel de lectura como corresponde: en 1° básico aprendiendo a leer.”

Llegó el 2020 y el sistema educativo se enfrentó a un gran desafío: entregar contenidos pedagógicos a distancia. Lo anterior, generó un mayor despliegue pedagógico en los primeros básicos, pues debían mantener la meta propuesta en relación al proceso lector.  “Nos organizamos con los docentes, teníamos a cinco profesionales que estaban trabajando y muy comprometidas para que el curso leyera a distancia, orientando a los papás, guiando muy de cerca el proceso y trabajando muy cerca de los niños. Como resultado, a fines del primer semestre ya teníamos familias con niños lectores”, indicó Gabriela Vega, agregando, “ahora de todo el curso, tenemos en este momento un porcentaje muy alto de nivel adecuado, muy muy alto, tenemos si dos niños que por sus necesidades educativas leen silábicamente, pero están leyendo, a nivel de lectura fluida y es muy muy gratificante, por lo tanto, nosotros determinamos que era importante no se perdiera la ceremonia de lectura, porque esa ceremonia ya la teníamos hace ya cuatro años consecutivos. Este año hicimos una ceremonia virtual donde se invitó a todos los profesores, a todos los asistentes, estaban los niños, estaba toda la comunidad, invitamos al Servicio Local porque creímos que era importante que hiciera parte, porque somos Servicio Local y si no fuera por eso, no tendríamos todo el staff de profesionales con los que contamos”.

Para finalizar, la directora hizo un llamado a promover la importancia de lectura, indicando, “para nosotros, la lectura y la escritura son los pilares de la educación. En la mente de un niño, la lectura puede ampliar su visión del mundo, generar nuevas expectativas, y obviamente eso creemos que es el deber de la escuela promoverlo. Para lograrlo, es necesario un gran compromiso interno, pero aquí funciona lo que es la educación pública, dar oportunidades a todos y trabajar en redes, porque no trabajamos solos, tuvimos un apoyo que está potenciando el desarrollo profesional interno y hemos logrado importantes aprendizajes en los niños y niñas”.