La Ley 21.040 establece las bases para la construcción de un nuevo Sistema de Educación Pública, y busca que ésta sea referente y estándar del sistema mixto que existe en el país: por la calidad y excelencia de la educación que entrega; por la equidad y buena convivencia que genera en sus establecimientos; porque es espacio de integración y formación ciudadana; y porque proporciona oportunidades y habilidades para el siglo XXI a sus estudiantes.
-Para garantizar calidad de la educación en todos los establecimientos públicos en cualquier territorio donde se encuentren;
-Para desarrollar al máximo las potencialidades de los niños y jóvenes con una mirada de futuro, centrándose en aprendizajes para el siglo XXI.
-Para generar una sana e inclusiva convivencia dentro del aula y que seamos parte y aprendamos a convivir como ciudadanos.
-Para entregar oportunidades reales a las y los estudiantes de la educación pública: trayectorias educativas, laborales y de vida.
-Para que participen y se involucren las familias en la educación de sus hijos e hijas.
El nuevo Sistema de Educación Pública está conformado por la Dirección de Educación Pública y 70 servicios locales de Educación Pública. Los Servicios Locales son los encargados del desarrollo técnico pedagógico y administrativo financiero de más de 5.600 escuelas y liceos, y 1.200 jardines infantiles.
Mejorar la calidad de la educación y entregar las herramientas para alcanzar esta meta es una de las principales tareas de la Dirección de Educación Pública.